Un toke en el Cuauhtémoc

Regresando del trabajo, ya casi llegando al lugar donde vivo noté a un vato que ya había visto en las fiestas... venia patinando... seguramente trae mota pensé... o digo, yo no tengo.. - que onda no traes un toke por ahí?, tu eres...? como te dicen? - calabaza..., el calabaza, no traigo ahorita voy a conectar - va te acompaño y me rolas un tanque ando bien erizo - no es que yo voy en chinga, mejor en el Cuauhtémoc - sobres deja me voy a quitar el disfraz y t veo allá. Va un porro no vendría nada mal, pero ese wey no va a ir... ni pedo me voy a dar una vuelta... camino y sigo perdiéndome en las calles mal hechas de mi propia ciudad... En mi casa solo me tomo un vaso de agua, me cambié y me lanzo al Cuauhtémoc, estaba a dos cuadras, habían dos chicas en la primera palapa, mas adelante dos chavos sentados con balón de fucho, seguí avanzando y no había señal del calabaza, el parque Cuauhtémoc es un tranquilo refugio en el centro de mucho movimiento, camine hasta el fondo y en la ultima palapa junto a la laguna había varias chicas uniformadas -han visto a un chavo de playera naranja? anda en patineta -nnnnoooo (eran cuatro), -va. De regreso pensaba si esperar al calabaza o ya regresar a mi cantón, en lo que decidía note a la distancia a mis ahora nuevos amigos los del balón de fucho que fumaban rebosante churro y me acerque, -ke onda rolen un tanque no?, -ya vas, un riel que dejó algún patineto me sirvió para sentarme y ya en confianza fumé de un churro medio roto... -chido, andaba buscando a un vato que se lanzó con el mudo pero no lo veo, -quien es?, como se llama? -no se como se llama, le dicen el calabaza -jajaja ese wey?, le diste dinero?, -no, a va lo conocen?, -simón, oye no traes una sabana?, no se le jala bien al toke... -dejame chekar... si bro!, curamos el porro y fumamos en risas de calma y platica sin importancia -ve ahí viene el calabaza -simón viene con otros eskatos... -ya se hizo la fiesta!, -ya nomas faltan la música y las chelas!... el calabaza y los otros eskatos solo se asomaron y siguieron su camino, ya en ese momento el calabaza tenía para mí la importancia que su apodo le otorga, uno de los amigos con los que fumaba se fue ya bien puesto y yo me quedé con el otro a terminar la bacha, solo hasta que me levanté volví a notar el riel sobre el que estaba sentado y me acordé de los patinetos... seguro eso buscaban.. sonreí somnoliento mientras caminaba a mi casa. En tiempos de escasez hay que aprovechar lo que cae... y que bien que me cayó el porro en ese momento...el resto es historia vieja... pidiendo limosna como Don Tomás, dándome el toke con desconocidos amigos futboleros, investigando en la historia, disfrutando de la luz en la oscuridad... recordando lo que será.